El Vaticano se prepara para elegir al sucesor de Francisco

Concluidos los nueve días de luto oficial por la muerte del papa Francisco, el Vaticano se encamina hacia el cónclave del próximo miércoles 7 de mayo, donde los cardenales menores de 80 años se encerrarán en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo jefe de la Iglesia católica.


La última misa de las llamadas Novendiales se celebró este domingo en la basílica de San Pedro y estuvo a cargo del cardenal Dominique Mamberti, quien ocupa el cargo de protodiácono del Colegio Cardenalicio. Mamberti será el encargado de anunciar al mundo la elección del nuevo pontífice con el tradicional “Habemus papam”.
Durante la ceremonia, Mamberti recordó al papa argentino y elogió su entrega hasta el final: “Yo estaba a su lado el día de Pascua. Fui testigo de su sufrimiento pero, sobre todo, de su determinación para servir al pueblo de Dios hasta el extremo de sus fuerzas”.
El cónclave reunirá a 133 cardenales electores de los 135 designados, ya que dos de ellos no podrán participar por razones de salud. La jornada comenzará a las 10 (hora local) con la misa “Pro Eligendo Pontifice” en la basílica vaticana, y por la tarde, a las 16.30, se dará inicio al encierro en la Capilla Sixtina para la primera votación.
La señal más esperada será la del humo que se elevará desde la chimenea: negro si no hubo acuerdo entre los cardenales, blanco si se alcanzó la mayoría necesaria y el mundo ya tiene nuevo papa.
Durante los días previos, los purpurados participan de congregaciones generales, espacios de diálogo donde intercambian impresiones sobre el estado actual de la Iglesia y los desafíos del futuro. Este lunes se duplicarán las reuniones para avanzar en consensos, en medio de un estricto operativo de seguridad y confidencialidad.
La Santa Sede desactivará cámaras, blindará accesos y exigirá juramento de silencio a todo el personal ajeno al proceso: médicos, asistentes, personal de limpieza y ceremonieros quedarán completamente aislados del recinto del cónclave. Los cardenales solo podrán salir una vez que se haya elegido al nuevo pontífice.
El proceso genera expectativa en todo el mundo, con atención especial en la fuerte presencia de cardenales latinoamericanos, quienes podrían tener un rol clave en la sucesión del papa Francisco, el primer pontífice nacido en América.