Mientras el pueblo racinguista celebraba el campeonato obtenido, la familia Sebastián Saja vivía un domingo de pesadilla. El papa del arquero de la Academia atropelló y mató a un nene de ocho años en la ruta 210, a la altura de Brandsen.

Daniel manejaba una camioneta Peugeot cuando arrolló a un niño cordobés que se había frenado junto a su familia a la vera de la ruta 63 para visitar un santuario del Gauchito Gil que se encuentra a esa altura de dicha carretera, en la localidad de Brandsen.

En el kilómetro mencionado, una familia oriunda de Córdoba, que iba a bordo de un camión en la misma dirección que Saja, quiso dejarle una ofrenda a la imagen del Gauchito Gil. El conductor detuvo su marcha, dejó el vehículo en la banquina, pero la familia tuvo que cruzar la ruta, ya que el santuario se encuentra del otro lado. El hombre bajó junto a su esposa y también lo hizo su pequeño hijo, pero éste último de forma imprudente. En ese instante venía circulando Saja, que no pudo evitar atropellar al nene, lo embistió de lleno y le ocasionó la muerte al instante.

"Mientras todos estaban de festejo, él a las 12 de la noche todavía se encontraba en la Comisaría, es una lástima lo que pasó", contó un vecino de la localidad.

Profundo dolor y conmoción en dicha ciudad, donde son oriundo los Saja.

Fuente: www.cronica.com.ar