Todo listo en Roma: el Cónclave para elegir al nuevo Papa comenzará el 7 de mayo

El Vaticano confirmó este lunes que los 133 cardenales electores ya están en Roma para participar del Cónclave que comenzará el próximo 7 de mayo, con el objetivo de elegir al sucesor del Papa Francisco. De esta forma, la Santa Sede anunció que están dadas todas las condiciones logísticas y eclesiásticas para iniciar uno de los procesos más significativos en la vida de la Iglesia Católica.


Aunque actualmente hay 135 cardenales menores de 80 años con derecho a voto, dos de ellos han notificado formalmente que no podrán asistir por razones de salud, reduciendo el número de electores a 133. Esto significa que para ser elegido Papa, un candidato deberá alcanzar al menos 89 votos, es decir, la mayoría de dos tercios.
Será el cónclave más diverso geográficamente en la historia del Vaticano, con cardenales provenientes de 71 países. Sin embargo, Europa sigue siendo el continente con mayor representación, con 52 electores, lo que marca el peso aún dominante de la región en la estructura de poder eclesial.
Asia, incluyendo Oriente Medio, aportará 23 cardenales, una cifra que destaca la creciente influencia de esa región en el catolicismo mundial. África tendrá 17 representantes, reflejo de un continente con un número cada vez mayor de fieles.
América del Sur contará con 17 electores, entre ellos figuras reconocidas por su labor pastoral y social en sus respectivos países. América del Norte estará representada por 16 cardenales: 10 de Estados Unidos, 4 de Canadá y 2 de México, lo que evidencia una sólida presencia norteamericana en esta elección clave.
Por su parte, América Central y Oceanía tendrán 4 representantes cada una. En el caso del Pacífico, los electores provienen de Australia, Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea y Tonga, reafirmando el carácter verdaderamente global de este cónclave.
El próximo martes, los cardenales ingresarán a la Capilla Sixtina bajo estrictas normas de secreto y solemnidad. A partir de entonces, se sucederán las votaciones hasta alcanzar el consenso necesario para anunciar al nuevo Pontífice que liderará la Iglesia Católica en una etapa de enormes desafíos globales y profundos cambios internos.