La PFA desarticuló una red internacional de trata sexual con conexión en Italia
Luego de una larga investigación iniciada en octubre de 2017, los efectivos federales pudieron determinar que una pareja captaba mujeres jóvenes con la excusa de que realizaran trabajos acorde a sus conocimientos y estudios en Italia, siendo esta situación un ardid que enmarcada una maniobra para introducirlas a una red de trata internacional con fines de prostitución.
A raíz de una denuncia anónima efectuada contra una mujer quien estaría realizando las maniobras antes mencionadas haciéndose llamar Lizz González, se iniciaron arduas tareas de campo sobre ella y su entorno, pudiendo individualizar e identificar al resto de los miembros de la banda quienes formarían una compleja red de trata.
La mencionada mujer, quien realizaba presencia en locales bailables (RRPP), cumplía el rol de captadora ofreciéndole a sus víctimas la posibilidad de trabajar en el exterior, secundada por un hombre de nacionalidad italiana quien llamaban Lorenzo, que gestionaba la documentación para que las mujeres salieran del país sin impedimento alguno, destacándose además que realizaba esas tramitaciones para jugadores de fútbol profesional que son transferidos al viejo continente.
Mientras que el padre de este último de nacionalidad italiana conocido como Giusseppe, también italiano, era quien solventaba económicamente el traslado de las víctimas y la recepción de las mismas en la ciudad de Roma.
Luego de alojarlas, las ubicaba en diferentes locales nocturnos de dicha ciudad, cumpliendo el rol que hacía las veces de nexo y receptor de las mujeres que llegaban a Italia para luego distribuirlas en diversos locales nocturnos de dicha ciudad, donde se las obligaría a ejercer la prostitución.
También las tareas realizadas por los efectivos policiales permitieron determinar que cuatro de las víctimas pudieron escapar de sus captores, logrando regresar al país por gestiones realizadas en la Embajada Argentina en Roma, quienes fueron entrevistadas en sus domicilios particulares sitos en la Ciudad de Autónoma de Buenos Aires y en Rosario bajo la supervisión de la Oficina de Rescate y Acompañamiento de Víctimas de Trata de Personas, quienes brindaron su apoyo y su resguardo emocional a las víctimas para que pudieran relatar los hechos denunciados.
Ante ello el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal Nº5 a cargo del Dr. Marcelo Martínez De Giorgi, Secretaría Nº10 a cargo del Dr. Pedro O. Diani ordenó el allanamiento y detención de Lorenzo y Lizz González y la captura internacional de Giusseppe.
En los domicilios de los dos primeros se logró el secuestro de 7 teléfonos celulares, una computadora, una cámara de fotos, un pen drive, tres vehículos de alta gama, una notebook, 101.000 pesos en efectivo, 5.000 dólares en efectivo, tres discos rígidos externos anotaciones y demás documentación de interés para la causa.