La última sesión del Concejo Municipal dejó como saldo un acuerdo político importante: se frenarán los aumentos de tributos municipales por cuatro meses, y los incrementos que sí se aplicarán, lo harán de forma escalonada y en menor porcentaje que lo propuesto originalmente por el Ejecutivo.

Martín Racca, concejal del bloque justicialista, fue uno de los impulsores de la propuesta que permitió atenuar el impacto en los bolsillos de los vecinos. En diálogo con Radio ADN, explicó que la iniciativa surgió tras analizar “el impuestazo del 306% del año pasado, aplicado por la actual gestión municipal”, que derivó en un excedente millonario en las arcas del municipio. “Si te sobran recursos es porque no lo estás gastando. Le vamos a pedir al intendente que sea eficiente en el uso de esos fondos”, expresó.

La postura original del oficialismo era aumentar un 13% los tributos a partir de junio. La oposición propuso directamente congelar los aumentos durante todo el segundo semestre. El resultado fue un punto intermedio: sin subas entre junio y octubre, y aumentos moderados del 6% en noviembre y 5,5% en diciembre.

“Somos cuatro concejales en el PJ, minoría, y logramos este consenso. Fue importante el diálogo y eso hay que destacarlo”, subrayó Racca, quien también valoró el marco en el que se dio la sesión: una escuela pública del barrio 17 de Octubre, como parte del programa que lleva al Concejo a sesionar en instituciones.

Por otra parte, el concejal cuestionó duramente la falta de debate en torno al proyecto para relocalizar la cárcel o alcaldía: “Presentamos un proyecto alternativo y ni siquiera se discutió. El oficialismo usó su mayoría automática como una escribanía”.

Respecto a la confusión sobre la naturaleza del nuevo centro de detención, Racca fue tajante: “Ponele el nombre que quieras: cárcel, alcaldía, jefatura. Lo importante es que allí habrá personas que cometieron delitos. Y si estamos todos de acuerdo en que debe salir del centro, no tiene sentido trasladarla a otro barrio dentro de la ciudad. Hay terrenos rurales donde no vas a tener este problema dentro de 100 años”.

Finalmente, el edil remarcó que “el municipio nunca ha podido explicar con claridad la proporcionalidad entre lo que cobra y lo que brinda en servicios”. Por eso, concluyó, la discusión sobre tributos no es solo técnica sino también política y de gestión: “No es solo cuánto se cobra, sino cómo y en qué se gasta lo que se recauda”.

Una sesión con avances concretos para los vecinos, pero también con reclamos que siguen sin respuesta.