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Maxi Ghione: un regreso a la vida rural, salud y raíces en Lehmann

El reconocido actor dejó Buenos Aires para apostar por un cambio de vida en el interior santafesino, donde encontró un nuevo sentido de pertenencia y una revitalización personal
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En una entrevista con Radio ADN 97.9, Maxi Ghione compartió su experiencia tras radicarse en Lehmann, Santa Fe, en diciembre de 2024. El actor, conocido por su papel en la novela Montecristo, se embarcó en un proceso de transformación y reencuentro con sus raíces, abriendo un bodegón llamado Lo de Solán, que rápidamente se convirtió en un punto de referencia en la región.

Con entusiasmo, Ghione expresó su profunda gratitud por la aceptación de la comunidad: “Hace más de seis meses que vivo acá y la respuesta fue impresionante. La gente de Lehmann, Rafaela, de los pueblos cercanos, me hizo sentir en casa". Su restaurante, caracterizado por ofrecer platos abundantes y un estilo de atención cercana y familiar, refleja su deseo de vincularse con la comunidad y compartir su espíritu de anfitrión.

El actor contó que el cambio fue motivado en parte por razones de salud: “Tengo EPOC. Mi médico y amigo me recomendó que viniera al campo, o de lo contrario, no me iba a recuperar. Bajé 20 kilos, dejé de fumar casi por completo y ahora ando a caballo. Esta vida me hace bien”. La decisión de alejarse de la vorágine porteña y reconectar con la naturaleza, la cocina y la gente, le ha permitido encontrar un nuevo equilibrio.

Además, Ghione aclaró los rumores acerca de los precios en su restaurante, desmintiendo versiones que lo calificaban como costoso: “Salió por ahí que comer acá costaba 70 u 80 mil pesos. Eso no es cierto. Aquí, la comida puede costar entre 20 y 30 mil pesos; nada que ver con esas versiones exageradas”.

En la entrevista, también se notó una profunda nostalgia por su hijo Juan, quien ahora reside en México. “Fue mi compañero toda la vida. Cuando él se fue, al otro día me vine a Lehmann. No me gusta ver Buenos Aires sin él”, confesó.

Para Ghione, esta etapa representa su regreso a sus raíces. “Yo me crié en un pueblo de 500 habitantes. Para mí, Lehmann es como Manhattan. Estoy feliz de haber vuelto al origen, de estar en contacto con los caballos, la cocina y la gente”, expresó con alegría.

Quienes deseen visitar Lo de Solán pueden encontrarlo en Lehmann, a pocos metros de la estación de servicio, y solo deben preguntar por Maxi, quien asegura: “Si llegás al pueblo y preguntás, todos te van a saber decir dónde queda”.

Con una historia de vida marcada por el arte, la salud y el reencuentro con sus raíces, Maxi Ghione demuestra que no hay edad ni circunstancias que impidan reinventarse y encontrar felicidad en los lugares que uno más ama.

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