La adulteración de medidores a distintos comercios y viviendas particulares llegaba a reducir el consumo hasta cinco veces. Así lo hizo saber el presidente de la Empresa Provincial de la Energía (EPE), Maximiliano Neri, en una conferencia de prensa en la que se refirió a la última investigación sobre fraude que arrojó imputados, aunque sólo uno permanece tras las rejas.

El procedimiento, a través del que se ofrecía el servicio irregular, consistía en adulterar medidores y cobrar una mensualidad para mantener esta prestación a los empresarios y vecinos.

Un electricista de nombre Marcelo adulteraba los medidores de energía eléctrica y de la concesionaria Litoral Gas, con el objetivo de que los usuarios abonaran menos energía.

La denuncia detalló también un número telefónico que el electricista usaba para comunicarse con sus clientes. Con este dato, se encomendó a la Unidad de Investigaciones de la EPE a realizar la denuncia correspondiente en el Ministerio Público de la Acusación.

La Brigada Operacional de Tribunales, llevó a cabo una investigación junto con la firma eléctrica, que incluyó intervenciones telefónicas, tareas de campo, análisis de consumos de energía y titularidad de los potenciales clientes, entre otras acciones.

A partir de allí se supo que este "servicio" se había llevado a cabo en alrededor de 15 domicilios. En esos sitios, fueron adulterados los aparatos de medición ubicados en un frigorífico, tres supermercados, una fábrica de pastas, una rotisería, panaderías, varias oficinas y numerosas viviendas particulares de Rosario, Granadero Baigorria, Villa Gobernador Gálvez, Funes y Arroyo Seco.

Los allanamientos se realizaron esta semana y permitieron secuestrar dos escopetas, un revólver y una cantidad importante de municiones de diverso calibre, aparte de más de 100 mil pesos en efectivo y dólares.

Los investigadores marcaron como dato saliente que también se halló un uniforme con el logo anterior de la empresa de energía, fuera de vigencia, además de un medidor de la EPE en el vehículo de uno de los detenidos, varias pinzas amperométricas, una caja de herramientas, una soldadora de estaño, integradores de medidores y otros elementos de trabajo manual.

"Y resultó muy llamativo que estos trabajos del electricista lograron reducir en cinco veces el costo del servicio", dijo Neri antes de resaltar que en su mayoría se trataba de usuarios con un perfil de alto poder adquisitivo.