En horas de la tarde el servicio del 911 recibe un llamado telefónico por parte de un masculino G. R. A. de 37 años y de H. R. M. de 55 años ambos domiciliados en la localidad de Castellanos quienes daban cuenta que el presunto asesino se encontraba en el lugar de los hechos.

Atentos al llamado, oficiales de la policía de San Antonio, se hicieron presente en el lugar junto con quienes habían realizado la denuncia y procedieron a dar ingreso al establecimiento dando con el masculino.

El mismo se encontraba en uno de los galpones exteriores del lado sur oeste y ante el aviso de los policías el mismo se entregó. En el lugar se hicieron presentes personal de la PDI y el fiscal en turno, Dr Loyola para seguir con la investigación pertinente.

Se espera que el homicida confiese el crimen para poder desarrollar el juicio pertinente, mientras tanto los agentes de investigación siguen recolectando pistas. Además se intenta determinar el arma que habría ocupado el asesino para llevar a cabo el crimen. Se cree que pudo haber sido una varilla de metal o un tacho de leche.