Los arqueólogos de la Universidad de Leicester descubrieron en una "capilla perdida" dos esqueletos que han estado tomados de la mano durante 700 años, según la oficina de prensa de la universidad.

Hasta ahora, se han descubierto once esqueletos en la Capilla de San Morrell en Leicestershire.   La capilla era "un sitio de peregrinación en Hallaton durante el siglo XIV", según el comunicado de prensa. También se han excavado las paredes y las baldosas de la capilla.

El equipo cree que es probable que los cuerpos se hayan enterrado fuera de la iglesia porque eran "criminales, extranjeros o enfermos".

El proyecto de excavación de cuatro años ha descubierto 11 esqueletos hasta ahora, así como restos de construcciones y monedas de los siglos XII y XVI.


Fuente: www.cnn.com