A las 7 de este viernes -como en toda la semana- Rafaela estaba sumergida en una nube de bruma. Con 18º de temperatura y 99% de humedad, la niebla reducía ostensiblemente la visibilidad. Sin lluvias, pero con calles mojadas y viento en calma, el comienzo de la jornada fue otra vez una postal típica de estación.

El pronóstico de Maxi Barovero no fue diferente al de cada uno de los días de esta semana: máxima en 22 grados, inestabilidad, y probables precipitaciones aisladas. 

La buena noticia llega recién el sábado por la tarde. Para ese momento se espera el ingreso de viento sur, con ráfagas intensas, que implicarían el descenso de las temperaturas y la mejora definitiva del clima. El domingo volvería a verse el sol en Rafaela.